SITUACIÓN, TRADICIONES E HISTORIA |
El municipio de Santovenia de la Valdoncina se adscribe a la provincia de León en lo administrativo y político. Se encuentra a escasos nueve kilómetros adscrito por ello al "alfoz", se emplaza en el suroeste de la capital, teniendo una situación privilegiada en cuanto a comunicaciones estando al pie de la autopista Campomanes-León y de la que une León con Benavente. Lo que hace que la zona se ofrezca como un punto estratégico sin igual para la distribución final. Su topónimo deriva de Santa Eugenia, se encuentra situado a 850 m. de altitud. |
Componen el municipio cinco núcleos urbanos que han sabido repartirse el protagonismo quedando Quintana de Raneros (Quintana-Raneros) y Villanueva del Carnero con la paz y tranquilidad de la vida residencial, Ribaseca y Villacedré se quedan con la condición industrial y Santovenia de la Valdoncina con la capitalidad del municipio. Sumando una población aproximada de mil novecientos habitantes. Tres arroyos atraviesan el municipio de nordeste a sureste: el Arroyo de Oncina (llamado "el reguero" por los lugareños, pierde su caudal durante los estíos) es el eje orográfico más importante de la zona al unificar las localidades de Raneros, Quintana, Santovenia y Villanueva del Carneo; el Arroyo del Valle, que llega desde la Virgen del Camino y se dirige hasta Ribaseca para terminar uniéndose al de Oncina a la altura de Onzonilla y , por último en la zona norte, el Arroyo de las Fontanillas, que discurre por las proximidades de Villacedré. Caracteristica del relieve del Valle de la Oncina es su paisaje salpicado de bodegas. La orografía está configurada por planicies y lomas de escaso relieve, constituidas por terrenos arcillosos y rañas, lo que ha facilitado el cultivo de cereales y viñedos, hoy en decadencia, sólo los Tesos de Tollo y Magaz se elevan ligeramente sobre esta planicie ex-agrícola. Cuenta cada uno de los cinco núcleos con Consultorio Médico, estando integrado desde el punto de vista sanitario en el Centro de Salud de Armunia. Cada uno de los pueblos está dotado de infraestructura para el desarrollo de las numerosas actividades culturales y de ocio que se desarrollan para enriquecer la vida de sus vecinos. En el núcleo de Santovenia de la Valdoncina, existen instalaciones polideportivas municipales dotadas con piscinas, cancha de tenis, campo de fútbol, cancha de boley-playa y cafetería, estando a disposición de todos los usuarios, sobre todo en el período estival, con gran afluencia de público. Especial mención merece la existencia de dos colegios, en Villacedré y Santovenia, que ahorran, y nunca mejor dicho, cualquier viaje fuera del Ayuntamiento a los niños que cursan educación primaria. La actividad económica más importante de la zona es la industrial, que representa el 62% seguida del sector servicios con el 28%. La mayoría de las empresas se ubican en Villacedré y Ribaseca. Las actividades relacionadas con la agricultura y la ganadería representan un 10%. El origen de Santovenia lo podemos encontrar con fecha de 905 en el Monasterio dedicado a Santa Eulalia, cuyo primitivo asentamiento fue, posiblemente el lugar del actual cementerio de la localidad, cuyos bienes se repartieron entre Ribaseca y Santovenia y de los cuales podemos encontrar imágenes en el Museo Diocesano de León. Por otro lado cuenta la leyenda que en sus inicios, el pueblo junto a su cementerio se encontraba en la zona hoy conocida como "El Lutero" (posible derivación fonética y gráfica de "El Otero"), con el fin de evitar posibles epidemias, un lugar donde manaban fuentes naturales para beber los animales y otra para las personas, este asentamiento terminó desapareciendo como consecuencia de un incendio y reconstruido donde hoy lo conocemos. Cuentan nuestros abuelos como en El Lutero u Otero, fueron hallados junto a una rueda y restos de huesos, las campanas y como aún suena en sus oídos la canción "Adiós Maria del Alma, una para Sustinio y otra para Quintana".
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